Cuando uno se decide…. Llegar hasta allí es pasar por un camino difícil, estrecho de posibilidades que con el tiempo se ensancha y deja paso a nuevos retos, objetivos, miradas….
Durante este camino el miedo nos invade, nos bloquea y nos deja sin movimiento. No hay posibilidad de cambio.
Nos encontramos en muchos momentos de la vida atrapados por el miedo, la inseguridad, el temor al cambio, a lo desconocido, angustiados por eso que queremos o que pensamos que deseamos querer o llegar a ser. Son estos mismos sentimientos y pensamientos los que no nos dejan avanzar hacia aquello que alcanzamos a ver, pero que tanto cuesta llegar.
Dar paso a la activación y al movimiento, a la apertura a nuevos caminos es poder movilizarnos hacia el cambio.
Para ello, la reflexión y el análisis de uno mismo nos ayuda a configurar ese camino hacia el cambio, trabajando los miedos, inseguridades y aceptando nuevas formas de hacer, pensar y vivir. Forma parte de este proceso la aceptación y responsabilidad de aquello que nos pasa, sentimos y queremos cambiar, decididos y llevar a cabo nuestras intenciones o propósitos hacia la satisfacción personal.
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